Ya iba tocando escribir.
¿Pero de qué? Bueno, cada vez que hablo de algo que tenga que ver
con la física la intensidad de los bostezos crece, y además han
aumentado los suicidios en España. Y ya no puedo hablar de lo mal
que están las cosas en mi país porque ya no es un país, ahora es
una marca registrada que crea confianza en los mercados, y no quiero
problemas con los TM ni los Copyrights. Y menos ahora, a como anda
el gramo de justicia en este país. O marca, o lo que sea.
Por otro lado está el
tema de que van a volver a poner El Equipo A en la tele. Sí, en el
canal ese que sólo echa Mc Gyver y Walker Texas Ranger las 24 horas.
Si antes era bueno, ahora lo va a petar. Pero hay poco que no se haya
dicho ya sobre el tema en la literatura formal, y además es un tema
que me queda un poco grande.
Y entonces es cuando las
tinieblas de la confusión dieron paso a la luz de las musas enviadas
por los reinos celestiales para darme una nueva razón para vivir: el
papa ha escrito un libro. Como sabéis su nombre artístico es
Benedicto XVI, pero un nombre tan antiguo no hace justicia a un
espíritu tan joven, así que aquí le llamaremos B2⁴, mucho más
actual. El libro tiene más de 170 páginas y sólo vale 17 euros,
que son menos de 10 céntimos por página; si tenemos en cuenta que el santo padre en persona ha coloreado las ilustraciones sin salirse ni un poquito, la palabra de dios nunca
fue tan barata. Animado con estas premisas, acudí raudo a la presentación del libro para aumentar mi espiritualidad.
El libro se llama La
infancia de Jesús, y no me
vengáis con eso de que ya os sabéis cómo acaba. B2⁴ ha estado
recabando datos, reflexionando, experimentando, teorizando y hablando
en latín, y los resultados de sus trabajos nos traen muchísimas
novedades, como que Jesús mola mucho y que está muy bien. Además de esto,
en el libro podréis encontrar valiosas reflexiones como que la
virgen María también mola bastante. No obstante, si bien queda
claro a la luz de los hechos que María era virgen y que la fecundó
una paloma extraterrestre sin tocarla no se han llegado a resultados
concluyentes sobre la existencia de mulas, bueyes u otros seres
mitológicos similares, que quedarán fuera de la historia oficial
por el peligro que entrañaría alimentar la superstición y las
fantasías; "debemos ceñirnos a la historia", indicó el papa ajustándose el gorro durante la presentación del libro.
Por
otro lado, el misterio de la estrella que guió a los reyes magos ha
quedado resuelto por recientes investigaciones. Resulta que fue una
supernova invisible sólo observable por reyes magos que nunca
existieron lo que permitió a dichos reyes magos encontrar el lugar
del nacimiento de Jesús (que recordemos mola mucho). "Hasta ahora
ningún rey mago inexistente se ha presentado para contradecir esta
hipótesis, así como no se ha hallado buey o mula que hayan aportado
documentos históricos fiables que demuestren su presencia en el
nacimiento", decía con todo rigor mientras bendecía su zumo de ciruelas.
Sobre
la virginidad de la madre de Jesús y la divinidad de su hijo no
queda duda, y B2⁴ lo ha demostrado irrefutablemente. Se ha basado
en el siguiente razonamiento: en la biblia nos cuentan el
anunciamiento del espíritu santo a la virgen María, durante el cual
no hubo otros testigos. Por lo tanto sólo estaba María, sólo ella
podía saber la naturaleza de su embarazo, y sólo ella pudo contarlo
para que quedara constancia. Por otro lado lo que contó es verdad.
De modo que ¿cómo podría haber coincidido lo que contó con la
verdad si hubiera mentido al contarlo? No se puede, es imposible, es
“una mula”, en argot clerical. Queda claro entonces que tiene que
ser verdad. Es por lo tanto un hecho histórico, probado
y contrastado, y así debe ser enseñado: la virgen María mola, si
bien pierde protagonismo tras la violación extraterrestre, habiendo
cumplido ya su papel en la trama principal. Además ha resaltado que
era una mujer valiente y razonable, que ni follaba ni mentía a los
escritores bíblicos ni abortaba tras ser violada por
extraterrestres, llegando así a lo máximo que ninguna mujer haya
conseguido en la iglesia católica en toda su historia. B2⁴
sentencia que lo natural es dar a luz sin mantener relaciones
sexuales previas, tal como dios quiso desde el principio, pero que
nos empeñamos en mantener ese estúpido ritual 9 meses antes
corrompiendo nuestra naturaleza.
Por
lo demás, la infancia de JC fue bastante bien. Fue aprobando por los
pelos pero sin esforzarse mucho, y solía escaquearse con los
deberes. En una ocasión le pusieron un problema: “Si repartimos 5
panes y 2 peces entre 5000 personas, ¿qué fracción de pan y qué
fracción de pez corresponden a cada uno?” JC fue el único que lo trajo resuelto,
pero luego se aclaró que su padre le había ayudado. Y así hasta que
un día en el recreo los romanos le pillaron. JC dijo que no valía,
que estaba en cruci, pero hubo alguna confusión con las reglas y la
cosa acabó descontrolándose. Bueno, confieso que esto me lo he
inventado, no me he leído el libro entero, pero es que yo cuando me
aburro me invento las cosas y así se me hace más corto hasta la
siguiente medicación.
Tras
la presentación de su nuevo libro el santo padre se retiró a su
cubil subterráneo donde consumió las almas de 1000 recién nacidos
en un ritual de orgías, drogas, zoofilia y sacrificios humanos, tras lo cual
se arrepintió de corazón por lo que irá al cielo para siempre por
no ser marica ni nada de eso. ¡Bieeeeen! Me encanta meterme con el
papa, qué tío tan divertido.